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Un cepillo de dientes tiene un tiempo determinado de vida y uso. Como es nuestro mejor aliado para combatir la placa bacteriana, entre sus cerdas y el mango acumula gran cantidad de bacterias, por lo que se hace indispensable cambiarlo con regularidad, casi siempre es cada 3 meses. Desde la Clínica dental el Carmen, os recomendamos que realicéis el cambio de éste con cada cambio de estación.
No hay que esperar a que el cepillo se desgaste, pues llegado a este punto es posible que la acumulación de bacterias en él sea excesiva. De media, se deben cambiar los cepillos de dientes cada 3 meses. No obstante, hay personas que tienden a cepillarse con fuerza dañando más el cepillo, por lo que deberían cambiarlo antes.
¡Recordad siempre que un buen cepillado de dientes es cuestión de tiempo y técnica pero nunca de fuerza!
Estudios han demostrado que después de 3 meses de uso regular, un cepillo es menos efectivo para remover la placa de los dientes y de las encías, en comparación con un cepillo nuevo. Las cerdas pierden resistencia y por consiguiente efectividad para llegar a las áreas difíciles de alcanzar alrededor de los dientes.
También es importante cambiar el cepillo dental después de un resfriado, gripe, infecciones bucales o dolor de garganta. Y es que los gérmenes se pueden esconder en las cerdas del cepillo y provocar una nueva infección. Incluso si no ha estado usted enfermo, en las cerdas del cepillo dental pueden crecer hongos y bacterias, lo cual es otra razón para cambiar de cepillo periódicamente.
No sigas alargando la vida de tu cepillo y cámbialo, cepillarse bien los dientes juega a tu favor, tu higiene y tu salud dental te lo van a agradecer.
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